La Fiesta de la Bulería de Jerez, el tercer festival flamenco de verano más antiguo de Andalucía, afronta una nueva edición marcada por la incertidumbre y los cambios. Desde que en enero se barajó la posibilidad de celebrarla en el Teatro Villamarta, poco más se ha sabido de un evento que lleva años alejado de su época dorada.
El festival, que aún no tiene fecha concreta confirmada —la web municipal solo indica que será en agosto—, presenta de momento como prinicpal novedad un nuevo cambio de ubicación. En 2025, se alejará — aunque no del todo— del complejo bodeguero de González Byass, donde se han celebrado recientes ediciones, y solo la jornada principal se mantendrá en el Patio de la Tonelería, según ha podido confirmar lavozdelsur.es.
Para el resto del programa, que incluirá tres jornadas previas, el Ayuntamiento de Jerez y Fundarte contemplan que sea la Plaza de Belén el escenario principal. La elección de este emplazamiento, que parece tener mal bajío desde que enterrara en bajo sus losas lo que iba a ser la Ciudad del Flamenco, busca aprovechar la afluencia de visitantes que permanecen en la ciudad y su entorno durante la segunda quincena de agosto, coincidiendo con la temporada turística.
Esta será la enésima reubicación del festival en apenas una década. Y resulta cuando menos curioso que, en los últimos once años, la Fiesta de la Bulería ha tenido más escenarios distintos que en las 46 ediciones anteriores, reflejo de la inestabilidad que vive un evento que languidece un poco más por cada año que pasa.
Aún se desconoce si los espectáculos que se desarrollen en la Plaza de Belén serán gratuitos o de pago, así como la composición definitiva del programa. Como también se desconoce bajo qué fórmula artística se llevarán a cabo porque, en otra más, el festival también ha cambiado según el año, sin que se haya asentado un modelo estable.
Festival itinerante tras salir de la Plaza de Toros de Jerez
Lo único cierto es que la Fiesta de la Bulería de Jerez se ha convertido en un festival itinerante desde que abandonó la Plaza de Toros en 2013. Su traslado en 2014 al Mamelón, aprovechando la infraestructura de la Vuelta Ciclista a España, no hizo más que comenzar un peregrinaje por distintos enclaves donde en ninguno se da con la tecla y, desde entonces, no ha encontrado un espacio que lo arrope con continuidad y proyección.
Además, no podemos olvidar hechos objetivos como que la última edición tuvo una entrada de unas 1.200 personas — el aforo del Teatro Villamarta— y que tiene un presupuesto entre los 150.000 y los 200.000 euros anuales que salen directamente de las arcas municipales, en este caso de Fundarte.
Los únicos que mantendrán su día y localización serán los Viernes Flamencos, que volverán a celebrarse en los Claustros de Santo Domingo, ofreciendo cierta estabilidad dentro de la programación cultural flamenca de verano en Jerez.
El presupuesto anual del festival oscila entre los 150.000 y los 200.000 euros, financiado íntegramente con fondos públicos a través de Fundarte. A pesar del respaldo económico, la Fiesta de la Bulería continúa sin lograr una fórmula que asegure su consolidación a medio y largo plazo.