La provincia de Cádiz no contará con conexión de alta velocidad hasta, al menos, el 31 de diciembre de 2050, según establece el Reglamento (UE) 2024/1679, aprobado por la Unión Europea en junio de 2024, que reestructura las prioridades de la Red Transeuropea de Transporte (RTE-T) en tres fases: 2030, 2040 y 2050.
Desde su nacimiento en 1992, el AVE ha sido sinónimo de modernidad y progreso en España. Ciudades como Madrid, Barcelona, Sevilla o Málaga han visto cómo la alta velocidad transformaba su conectividad y su economía. Sin embargo, Cádiz, tras décadas de pomresas y reivindicación, pese a ser uno de los destinos turísticos más punteros del país, seguirá esperando.
Un plan ferroviario que relega a Cádiz
El nuevo marco europeo clasifica las infraestructuras ferroviarias en tres categorías: ‘Railways core’ (núcleo principal para 2030), ‘Railways extended core’ (núcleo ampliado para 2040) y ‘Railways comprehensive’ (red global para 2050). Cádiz queda incluida en esta última, junto a otras pocas provincias sin acceso al AVE hasta entonces.
La tan deseada conexión de alta velocidad entre Sevilla y Cádiz figura en los planes, pero no con línea nueva: se usará la vía existente, adaptada para permitir velocidades superiores a 200 km/h, en lugar de una infraestructura específica como en otras capitales.
Esto implica que Cádiz no será prioridad frente a proyectos más ambiciosos como la Red Starline, prevista para 2040, que permitirá trenes a 400 km/h entre 39 ciudades europeas de diez países. Ninguna de estas conexiones incluirá a la provincia gaditana.
Una de las pocas capitales sin AVE
Actualmente, Renfe prevé la extensión del AVE a ciudades como Bilbao, Pamplona, Almería, Huelva, San Sebastián, Burgos, Soria, Vitoria o Salamanca. Cádiz, por el contrario, se une a Logroño, Santander y Jaén como una de las cuatro capitales que no contarán con este servicio en al menos 25 años.
Pese a ello, la demanda existe. En 2019, el Alvia Cádiz-Madrid batió récords con 895.000 viajeros. Sin embargo, tras la reducción de frecuencias en 2024, esa cifra cayó a 671.000 pasajeros, reflejo de una red limitada y poco competitiva.
El Gobierno de Pedro Sánchez ha mostrado poco entusiasmo con la llegada del AVE a Cádiz. El ministro de Transportes, Óscar Puente, advirtió que la obra “nos va a suponer un montón de dinero” y la calificó como una “inversión bestial”, mencionando también retos técnicos como las curvas de la bahía y el ancho de vía ibérico frente al estándar europeo.
Malestar en Jaén con el AVE
El Grupo Popular en el Ayuntamiento de Jaén ha advertido sobre una "nueva discriminación" del Gobierno de Pedro Sánchez en materia ferroviaria. Según han señalado, esta situación queda reflejada en el Atlas de la Alta Velocidad publicado por la Unión Internacional de Ferrocarriles, que recoge proyectos en España que suponen la incorporación de 1.500 kilómetros adicionales a la red existente. "Ninguno de estos proyectos contempla actuaciones en la capital jiennense", han reprochado desde el grupo municipal.
En concreto, además de los proyectos en ejecución, el Atlas informa sobre siete líneas planeadas por el Ministerio de Transportes que no discurren por territorio jiennense. Esto evidencia, según expone en una nota el portavoz del Grupo Popular, Agustín González, el "desprecio" del Gobierno central a una ciudad "sometida por Sánchez a la marginación ferroviaria", ha criticado.
Para el portavoz es prioritario que Jaén forme parte del mapa de la alta velocidad, dado que su "exclusión" repercute en los ámbitos social, económico y demográfico. "Social porque afecta al principio de igualdad entre españoles y económico, porque la falta de conexiones impide la implantación de empresas, circunstancia que a su vez limita el crecimiento de la población", ha subrayado.