Los chefs madrileños Javier Goya y José Fuentes se suman a la vibrante oferta gastronómica de Zahara de los Atunes, en la provincia de Cádiz, con la apertura de dos nuevos restaurantes: Clandestino y Casa Candela. Ambos proyectos reflejan la experiencia y el sello personal de estos cocineros, que buscan consolidar su presencia en una zona en la que Fuentes ya se ha ganado un hueco tras años al frente de la Taberna Trasteo.
Clandestino está abierto desde el 11 de abril, en la calle Pajares. Ahora, el local recupera su nombre original y aprovecha su privilegiada ubicación a pie de playa. En primera línea, de forma que la mayor parte de la terraza está sobre la arena.
Así es Clandestino
Este nuevo restaurante apuesta por una carta en formato ración con platos de productos sencillos y sin muchas florituras. Entre sus especialidades destacan las verduras, crudos como el atún rojo, pescados, ostras y una variada oferta a la parrilla. El tardeo también tiene su espacio entre almuerzos y cenas, con una propuesta de copas y cócteles con unas vistas inigualables al mar.
En la parrilla se puede degustar rapito, lubina estilo China —con jengibre, cebolleta, puerro, soja y chiles—, calamar de potera, txuleta de vaca vieja Discarlux, pluma ibérica 100% de bellota, butifarra, chorizo criollo picante, onglet y coquellete. Los arroces secos al mediodía, como el de pluma ibérica con butifarra y trompeta de la muerte o el de rape y pulpo, que se ofrecen también en formato individual.

En los fogones de este nuevo establecimiento se juega con la fusión y destaca por las influencias extranjeras, algo que se refleja en propuestas como la lubina estilo chino, una de las más celebradas.
Casa Candela: brasas y carnes premium
La otra propuesta gastronómica de esta pareja profesional se encuentra a apenas 150 metros de la playa, frente al castillo La Almadraba y justo delante de su muralla. Según recoge Cosas de Comé, Casa Candela cupa el espacio donde antes se ubicaba La Parda del Sur y suma un tercer socio: Juan Poley.
Aquí, las brasas vuelven a ser protagonistas, aunque con un enfoque más centrado en la carne. Con Discarlux como proveedor de referencia, el restaurante apuesta por cortes premium y un formato creativo y lúdico. No llega a ser un asador al uso: destacan platos como el anticucho de verduras, el kebab de cordero o los pinchos morunos, todos servidos en raciones pensadas también para compartir.
Aunque el foco está en la carne, la carta incluye “algo de atún, crudos y entrantes más divertidos y frescos que no tienen nada que ver con lo que ofrecen en Zahara”, adelantan sus responsables. Además, sustituyen los habituales espetos de pescado por versiones de espetos de carne. En esta ocasión, el concepto se aleja de lo informal para ofrecer un ambiente más cuidado, con mesas bajas tanto en el interior como en la terraza.
Casa Candela busca atraer tanto a locales como visitantes que aprecian la calidad del producto, la originalidad en la propuesta y el carácter acogedor del nuevo espacio. Dos nuevos puntos gastronómicos que afianzan a Zahara de los Atunes como destino imprescindible para los amantes del arte culinario.