El grupo municipal socialista solicitará en el próximo pleno municipal –este mismo viernes– que se convoque "una reunión conjunta sobre la Feria del Caballo". Los socialistas pretenden que en dicha reunión participen, además de todos los grupos municipales con representación en el Ayuntamiento de Jerez, agentes sociales, colectivos vecinales y entidades implicadas –se entiende que con los distintos colectivos de caseteros a la cabeza– a fin de "evaluar el impacto de las nuevas ordenanzas aplicadas en la Feria del Caballo 2025" y "estudiar iniciativas de mejora para futuras ediciones".
Sería interesante que el gobierno municipal accediera a la petición socialista y convocara una reunión de estas características en la que escuchara y se explicara, aunque será complicado que acceda.
El PSOE, es cierto, se está mostrando con todo lo relacionado con la nueva ordenanza crítico, pero a la vez comedido. Criticó los cambios –y la forma en que se produjeron– en el plano de la Feria y no comparte el criterio de crear una zona específica para las casetas discoteca, pero el portavoz, José Antonio Díaz, tampoco ha roto la baraja. "La aplicación de las nuevas normativas para la Feria del Caballo ha generado debate en la ciudad y los nuevos cambios propuestos no han tenido el efecto de mejora deseado. Nadie discute ya la necesidad de adoptar decisiones que mejoren nuestra Feria. El PSOE defiende que se debe actuar con claridad y responsabilidad para garantizar que la Feria siga siendo un motor cultural y económico, manteniendo su tradicional identidad", concluye el grupo socialista en un comunicado de prensa.
Un tanto de puntillas
Lo cierto es que este año el gobierno municipal ha pasado relativamente de puntillas en cuanto a la valoración de la Feria. Fue la alcaldesa Pelayo la que emitió al día siguiente de su conclusión, el mismo domingo, un comunicado en clave positiva, en el que, por cierto, no se hacía mención el grave apuñalamiento del portero de una caseta. Eso sí, la propia alcaldesa reconocía que hay aspectos en los que hay que mejorar, algo que ya le 'compró' el PSOE en su primera valoración. Lo cierto es que, en efecto, teniendo en cuenta la entrada en vigor de las nuevas ordenanzas y toda la polémica que se creó hace un par de meses con el nuevo plano de feria que motivó la 'revuelta' de algunos caseteros, la valoración que ha salido de las filas del gobierno municipal parece un tanto pobre, transmitiendo la sensación de que con prisas por pasar página.
En efecto, parece buena idea recapitular sobre la fiesta por excelencia de la ciudad y escuchar a todas las partes para mejorar determinados aspectos, algo en lo que está de acuerdo hasta el propio gobierno municipal.